7 de agosto de 2009

Vivir ...

Éste ha sido particularmente un año que no podré olvidar. Un año de extremos, de cosas buenísimas o malísimas, como si no existiera el término medio.

Sin duda hace mucho que no me tocaba vivir y sobrevivir de ésta manera.
Sufrí la pérdida de dos amigos, gente jóven, con hijos, que deberían haber tenido toda una vida por delante.
Y para que mentir, yo me llevo muy mal con la muerte. Me llevo mal con las ausencias.

Lamentablemente no queda más que
aceptarlo, y quedarse con los buenos momentos compartidos. Pero si algo aprendí, es a vivir más el hoy, a decirle al de al lado cuánto lo querés, pero AHORA, no dejarlo para mañana, porque el HOY es lo único seguro que tenemos.

Y tengo un querido amigo, que mima a sus amigos con sus palabras a diario, y que hoy me despertó con un precioso post en su blog. No vinculo porque mencionó mi nombre y apellido, pero copiaré textualmente el texto, obviando mis datos. Porque debo agradecerle tán dulce homenaje, y porque seguro no sabe lo que me ha costado mantener la sonrisa ésta semana, y lo feliz que me hizo hoy.


Las Tejedoras de sueños ...


Mi querida amiga (...) teje.
Pero de verdad teje y teje mucho y muy lindo.
Trabaja como programadora web, es docente, estudió Arquitectura, fue cronista y es madre de una topita hermosa, pero, a pesar de todo eso, siempre tiene tiempo para tejer.
(...) teje sonrisas hermosas de muchos colores.
A veces tienen forma de gorros, otras de bufanda y otras no las puedo descifrar porque tienen formas rarísimas y nombres igual de raros que ni te cuento, pero igual yo le digo a ella que me gustan, porque de verdad me gustan aunque no sepa qué son ni para que sirven.

Todas tienen algo en común, su sonrisa.
Ella está tan contenta cuando teje que se lo cuenta a cuanta persona se le cruza por delante, sea en la web o en la vida. Tiene un Blog donde muestra todo lo que teje con sus amigas (www.topita-voladora.blogspot.com).
¿A qué viene el cuento? es que ayer a mí me recomendaron tejer.
“¿Porqué no aprendes a tejer a ver si se te calma un poco la ansiedad?”
me dijeron riendo.
Yo también primero me reí.
Después me acordé de (...).
Y después pensé ¿pero no será que yo también soy tejedor?

Yo creo que sí.

Solo que yo tejo palabras y las voy entrelazando hasta darle alguna forma rara y mucho menos organizada que ella.
No tejo con lanas de colores sino con historias de vida.
Y también las muestro en un Blog.
Claro que la diferencia entre lo que tejemos (...) y yo es abismal: lo de ella cubre. Lo mío descubre.
Lo de ella es hermoso, lo mío generalmente doloroso.
Ella destina su tiempo a los abuelos del Piñeyro del Campo y yo a Kirchner, Chávez o Bush.

Pavada de diferencia...
Ella es mucho más sabia que yo, obvio.

(Pss... che... querida amiga, entre nosotros, ahora que no nos escucha nadie, mira cómo me vine a dar cuenta que vos y yo somos colegas…
Quien hubiera dicho…
)

Gracias Alfredo! gracias por estar!

besos!

2 comentarios:

  1. Me ha emocionado tu post.
    Muchas veces paso, y no se por qué, me voy silenciosamente.
    Pero hoy te digo, ha sido un bello post, agridulce, como la vida.
    Buen fin de semana :)
    Silvana
    Morocha

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  2. Muy lindo post y decile a tu amigo que puede tejer palabras y lanas ya que el Dr. Favaloro tenía a todos sus amigos abrigados con sus bufandas.Lo usaba como terapia y para mantener su mano siempre activa para las intervenciones.
    Muy lindo lo que te escribió!!!.
    Cariños.

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